¡Hola, jugador! Te traigo las reglas del Chinchón, una propuesta muy tentadora para que incrementes una alternativa más a tus opciones de juegos con baraja española. Si, además de amante de los naipes, eres fan de las apuestas, no puedes dejar de dominar el Chinchón (en algunos sitios llamado Chinchorro), un juego que, junto al Póker y el Mus, integrará la lista de tus preferidos a la hora de decir: ¡Subo más!
Barajas para jugar al Chinchón
Ya te adelanté que el Chinchón se juega con la baraja española. Debo añadir un par de cositas más: Puedes usar tanto la baraja española de 40 naipes, como la de 48 (que tiene ochos y nueves), o la de 50 naipes (que incluye además 2 comodines). Debes prestar especial atención al valor de las cartas, lo cual definirá tanto las jugadas como el recuento de puntos.
También se puedes usar más de una baraja, lo que permite no tener que reciclar con frecuencia el mazo de descartes, así como aumentar la cantidad de jugadores.
Valor de las cartas en el Chinchón
El valor de las cartas, durante el juego, es el siguiente:
- Rey, Caballo, y Sota: 10 puntos (hay lugares donde se juega con valor de 11 o 12 puntos para las figuras)
- As: 1 punto
- Resto de las cartas: Su valor natural, o sea, el índice que muestra cada naipe (2, 3, 4…)
Cantidad de jugadores en el Chinchón
Se puede jugar a partir de 2 personas y hasta 4, si se usa una sola baraja. Si se juega con dos barajas, los jugadores pueden aumentar hasta 8.
El Chinchón siempre se juega de manera individual. Aquí no se forman parejas ni equipos, no es un juego colaborativo.
Objetivo del juego del Chinchón ¿Cómo se gana al Chinchón?
En el Chinchón se juega por puntos, pero, en lugar de querer ganar puntos, necesitarás perderlos. Sí, en el Chinchón los puntos positivos te harán perder, y los negativos te harán triunfador.
Al inicio del juego se fija una cantidad tope de puntos, que puede ser 70, 100, 120, 150… Durante la partida, tus acciones triunfadoras te harán anotarte puntos negativos (puntos para restar), y las malas jugadas te proporcionarán puntos positivos (puntos para sumar).
Cada vez que un jugador alcanza el límite de puntos establecido como tope, es eliminado de la partida. El jugador que logre sobrevivir hasta eliminar a todos los demás, gana. Esta es la victoria por supervivencia.
Existe, sin embargo, otra forma de ganar, que es la ideal, la que da nombre al juego y cubre de gloria al poseedor del título: Es la jugada Chinchón, que consiste en armar una escalera de 7 cartas consecutivas de un mismo palo, sin usar comodines. Con esta jugada, se consigue la corona del triunfador indiscutible.
Jugadas del Chinchón
Para poder perder puntos vas a necesitar deshacerte de cartas. La única forma de perder cartas es formando conjuntos con ellas, que son las jugadas del Chinchón. La acción de vincular las cartas en estos conjuntos se conoce como “ligar cartas”. Las cartas ligadas se pueden sacar de la mano, echando el conjunto, o jugada, a la mesa. Por cada conjunto se te restarán puntos (puntos negativos). Las cartas que no logres ligar, en cambio, se quedan en tu mano y te suman puntos positivos.
Estas son las jugadas del Chinchón, es decir, los conjuntos o ligues que puedes armar:
- Grupos de cartas (también llamados pies): Son grupos de naipes del mismo número. Su cantidad mínima es 3, y la máxima va a depender de cuántas barajas estén usando en el juego, porque eso es lo que determina cuántos naipes de cada número hay disponibles.
Ejemplo: 5-oros, 5-bastos, 5-espadas
- Escalera: Cartas de número consecutivo, del mismo palo. Su cantidad mínima es 2. Se pueden usar comodines para sustituir cualquier carta que no se posea, y conseguir así armar el ligue.
- Chinchón: Es una escalera de siete cartas (todas las de la mano), de números consecutivos, del mismo palo, y que no contenga comodines.
Desarrollo de la partida
Ahora veamos cómo se desarrolla una partida de Chinchón, paso a paso. Asumamos que ya los jugadores han decidido el tope de puntos, y han colocado las apuestas en el bote después de fijar su monto, y partamos de ahí: La partida comienza con el reparto de cartas, sigue con los descartes, luego viene el momento de cerrar la mano, la colocación de cartas, y termina con el tanteo.
Reparto de las cartas
Se decide al azar quién va a ser el repartidor de cartas. Habitualmente esto se hace sacando cada uno una carta para ver quién tiene la mayor. En caso de empate se repite el procedimiento hasta que alguien sea el favorecido por la suerte. El jugador situado a la derecha del repartidor será el mano.
El repartidor le entrega a cada jugador 7 cartas cubiertas. Luego coloca el mazo de cartas bocabajo en el centro de la mesa, extrayendo antes la última carta del mismo y dejándola descubierta al lado del mazo.
Descartes
Comienza los descartes el jugador mano. Este, después de estudiar las cartas que posee y organizarlas según los ligues que pueda hacer, decide qué carta va a arrojar. A la hora de tomar otra carta a cambio, puede elegir entre la carta que se dejó descubierta luego del reparto, o tomar una del mazo cubierto. La carta que se desecha se coloca descubierta sobre la mesa, y en ese sitio se formará el mazo de descartes. La carta superior de este mazo siempre estará disponible para ser tomada, si se desea.
Después del jugador mano, los otros harán la misma operación, por turnos, estudiando sus posibilidades de ligues, y efectuando los descartes que consideren oportunos.
Los descartes se suceden ilimitadamente, y solo cesarán cuando un jugador cierre la mano.
Cerrar la mano
El cierre de la mano se produce cuando un jugador, en su turno, decide expulsar sus cartas ligadas. Esto no puede hacerse durante la primera ronda de descartes, y es necesario esperar a que todos se hayan descartado al menos una vez, o hayan tenido la oportunidad de hacerlo.
Para cerrar la mano, el jugador que quiera hacerlo puede tener sus 7 cartas ligadas (con cualquiera de los conjuntos antes explicados), o solo algunas, siempre que las cartas que le queden sin ligar tengan un valor total inferior a 3 puntos (en algunas modalidades este límite es de 5 puntos).
También se puede cerrar la mano tirando la jugada Chinchón, en cuyo caso el jugador gana definitivamente la partida.
Colocación de cartas por los demás jugadores
A partir del jugador que cerró la mano, el resto, en el mismo orden en que venían jugando, pueden soltar cartas suyas que tengan ligadas. Las cartas no ligadas también pueden soltarse en esta fase, aunque, únicamente, si es posible unirlas a alguno de los ligues expuestos por los contrarios, siguiendo, obviamente, las reglas para formar los conjuntos.
Por supuesto, todo el mundo trata, en esta fase, de deshacerse de la mayor cantidad de cartas posible, puesto que aquellas que le queden en la mano van a puntuar en su contra.
NOTA IMPORTANTE: Si, cuando se muestren los conjuntos de todos, algún jugador tiene todas sus cartas ligadas (sea por grupos de cartas, por escalera, o por ambos tipos de conjunto), se pierde la posibilidad de que los rivales puedan expulsar cartas sin ligar insertándolas en las combinaciones de los demás. Por lo tanto, el resto de los jugadores podrán desprenderse de sus cartas combinadas, pero no de las sueltas.
Tanteo
Cada vez que se produce un cierre de la mano, se procede al conteo de puntos. El jugador que cerró la mano va a tantear se la siguiente forma:
- Si cerró con Chinchón, gana la partida.
- Si cerró con todas sus cartas ligadas mediante distintas combinaciones, obtiene 10 puntos negativos (esto significa que se le descuentan 10 puntos)
- Si cerró con una escalera de 7 cartas, que no constituye Chinchón porque contiene comodines, los puntos que se restan se cuentan así: Por usar 1 comodín, -50 puntos; y por usar 2 comodines, -25 puntos.
- Si cerró con cartas sobrantes se le anotarán los puntos positivos que correspondan, según el índice de dichos naipes (nunca será más de 3 o 5 puntos, según la cantidad que se fije como límite para poder cerrar la mano)
El resto de los jugadores sumará puntos positivos según el valor de las cartas que le quedaron en la mano, aquellas de las cuales no pudieron deshacerse.
Los jugadores que, al exponer sus combinaciones, tengan todas las cartas ligadas, no suman puntos, pero no se les restará nada tampoco, ese es un privilegio reservado, únicamente, para el que cerró la mano.
Declaración de vencedor
Cuando un jugador sume tantos puntos que sobrepase el límite fijado al inicio del juego, queda eliminado. De esta forma, partida tras partida, se irán eliminando jugadores, hasta que, el que haya sobrevivido a todos sus contrincantes, sea proclamado vencedor y se lleve todo el contenido del bote. El bote contiene las apuestas iniciales, y las cuotas pagadas durante la partida por concepto de reenganche. (En breve sabrás qué es el reenganche, no te preocupes)
Por ejemplo: Se fija el juego a 100 puntos. Cada vez que un jugador acumula 100 puntos positivos, el mismo es sacado del juego.
Recuerda que existe otra forma de obtener la victoria que es jugando Chinchón. En este caso, el triunfo es inmediato y no se precisa hacer conteo de puntos.
Pero ¿Qué pasa cuando hay empates? Los empates tienen su forma específica de resolución. Te los explico enseguida.
Forma de resolver los empates
Cuando todos los jugadores han rebasado el límite de puntos a la vez (y por tanto se considera eliminado todo el mundo), se procede a comparar sus contadores, y se declarará ganador el que menor lo tenga.
Si los contadores de puntos son iguales, entonces el ganador será el jugador que cerró la mano en esa última ocasión, cuando se generó la situación de “todos eliminados”.
Reenganche: La posibilidad de seguir en la pelea.
Los jugadores que quedan eliminados por puntos tienen, no obstante, la posibilidad de volver al combate. Esto se conoce como reenganche, y consiste en lo siguiente:
El jugador eliminado que mantiene los deseos de revancha debe depositar en el bote una suma correspondiente a la mitad de la apuesta inicial. Hecho este pago, recibe naipes nuevamente. Sin embargo, el reenganche se produce con desventaja, pues su cuenta de puntos no estará en ceros, sino que tendrá un acumulado igual al jugador que más alto tenga el contador al momento del reenganche.
Anota el Chinchón en tu lista de favoritos
Una vez que hayas probado el Chinchón, y practiques lo suficiente como para sentirte seguro, no hay dudas de que quedará registrado en tu lista de juegos de apuestas favoritos. Como has podido ver, no es un juego demasiado complicado. Tiene sus particularidades, pero nada tan quebrador de cabeza como para que afecte el disfrute.
Es, además, un juego bien movido, activo. Partida tras partida, podrás sentir la adrenalina corriendo por tus venas, la pasión de las apuestas, mientras luchas por ganarte el bote haciendo los mejores ligues de cartas.
Última actualización el 2024-04-18 / Enlaces de afiliados / Imágenes de la API para Afiliados
